¿En qué quedamos?

La actual secretaria del Departamento de la Familia, Yanitsia Irrizary, hizo comentarios sobre el compromiso del gobernador de Puerto Rico, Luis Fortuño, por erradicar la violencia doméstica (vea la noticia). Por un lado, dedo aplaudir que se esté dando un enfoque diferente en donde se trabaje con los hombres, no sólo los agresores, sino con la sociedad en general. Por otro lado, y esta es la parte que me impresionó, la Secretaria del Departamento de la Familia comentó: "El que el Gobernador prometa retar a otros hombres a reconocer que pueden ser fuertes, sin agredir, va con nuestro mensaje para salvar a las familias que viven en una crisis social que va más allá de la bancarrota económica" (refiriéndose a la violencia doméstica).

¿No es precisamente el hecho de que a los varones se les enseñe ser fuertes lo que contribuye a la violencia?

Me parece que es un mensaje contradictorio. Si queremos cambiar de paradigma lo primero que tenemos que hacer es romper con los esquemas de lo que debe ser un hombre: fuerte, varonil, enérgico, y macho. Por ejemplo, no puede llorar, debe ser fuerte, no debe mostrar sus sentimientos y no puede tener miedo.

¿Acaso piensan que podemos romper con la violencia doméstica si continuamos predicando un hombre fuerte y una mujer sumisa?

¿Tu qué crees?

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